La semana pasada, Microsoft presentó una serie de productos nuevos. Entre estos están el nuevo navegador Spartan, el sistema operativo Windows 10, el asistente personal Cortana –siguiendo la estela que Apple asentó con Siri-. Lo más destacado del evento fue la presentación mundial de las revolucionarias Hololens.
Hololens: hacía la realidad mezclada
Se trata de un headset de lo que Microsoft ha acertado en denominar "realidad mezclada". Así son las revolucionarias Hololens.
Desde que el mundillo tecnológico se revolvió con el anuncio, han llamado a este dispositivo “el nuevo escritorio”, "las gafas para hologramas", “el futuro de la informática”, “la llegada definitiva de la realidad aumentada”, “el gran rival de Oculus Rift"... Veamos si podemos sacar algo en claro.
Antes de nada, y técnicamente hablando, las Hololens, por el hecho de trabajar a partir de un mundo físico real sobre el que superponer objetos virtuales, se engloban dentro de la categoría de AR –Realidad Aumentada-. Estos objetos son hologramas, sí, y mucho más.
Hololens ha sido diseñado por los encargados de la revolucionaria tecnología Kinnect. También han sido una pieza fundamental en la consecución de este logro tecnológico un científico de la NASA. Éste explicó a uno de los responsables de las gafas cómo el Laboratorio de Propulsión a Chorro planea utilizarlas en un futuro. Esto les permitirá acercar territorios extraterrestres a los científicos de una manera única e inalcanzable hasta la fecha. Además, permitirá introducirles en lugares con los que trabajan diariamente 'desde lejos'.
Puertas abiertas de cara al futuro
Algunos las han descrito, guiados más por su nombre y su funcionamiento aparente, como unas gafas que permiten ver hologramas. Se trata de elementos virtuales creados en un mundo físico.
Dicho mecanismo es la base de la Realidad Aumentada. Ésta utiliza dispositivos con cámara integrada para poder visualizar el contenido virtual a través de su pantalla. Pues bien, más allá de su semejanza, las Hololens pretenden, a partir de este concepto, sustituir a la pantalla tradicional. Convertirse en nuestro escritorio, el entorno definitivo en el que interactuar informáticamente.
Ya que Microsoft pretende, con este cambio sustancial, dar un giro muy brusco hacia el futuro en cuanto a la manera de interactuar con la informática, ha vuelto a sus orígenes, cuando el Paint se hizo mayor con el Windows 95, aprovechando los gráficos de "alta calidad y color" de aquel entonces.
Como entonces, ha creado un entorno en el que todavía no han salido al mercado. Se prevé que el lanzamiento de las novedades anunciadas en el evento de hace una semana, se realizará de manera conjunta. Se presentará tanto el nuevo sistema operativo Windows 10, como un nuevo navegador Spartan –que entierra definitivamente al –por llamarlo de alguna manera- mítico navegador Internet Explorer; y las Hololens, tendrá lugar a partir de febrero, comenzando por la versión de Windows 10 para Windows Phone.
Microsoft vuelve a la carga. O no.
Juzgad vosotros.